Postura Corporal para el canto.

Una buena postura es fundamental para una buena producción vocal.

¿En que consiste tener buena postura?
Cuidar la postura es hacer como que la sustentación y el equilibrio de nuestro cuerpo este de acuerdo con las leyes de gravedad. Es importante observar que los desequilibrios posturales varían de persona a persona. Algunas poseen una excelente postura, manteniéndose con los hombros extremamente abiertos, el pecho empinado para el frente y la cabeza muy erguida, tensionando el cuello.

Si miramos a esas personas de lado, podemos ver que casi se caen hacia atrás, estas personas tienden a respirar con la parte alta del pulmón. Hay otras personas que tienen el equilibrio inverso, hombros muy caído, pecho hacia adentro, una mochila en la espalda. Como si se fueran a caer de frente. Ambas posturas son incorrectas. Debemos intentar mantener el equilibrio de manera que podamos sentir el peso de nuestro cuerpo entre los 2 pies, observando enseguida un encaje perfecto de la cintura pélvica, en equilibrio con la cintura escapular (hombros) y manteniendo un ángulo de 90°. Hombros deben estar relajados, cabeza recta en fisonomía natural sin rigidez, la boca moderadamente abierta, los labios apoyados delante de los dientes, la mandíbula no debe estar rígida. Todo el instrumento vocal debe dar la sensación de flexibilidad muscular. No debe haber ninguna contracción de los músculos vocales en el tórax, pecho, laringe, garganta y boca.

La resonancia correcta y llena de la voz se producirá con la disminución y equilibrio de los esfuerzos musculares. El cuerpo debe estar derecho pero sin rigidez, con la sensación de tranquilidad. Se debe evitar el movimiento del cuerpo recogiendo apoyo en ambas piernas alternadamente. Evitar el movimiento nervioso de las manos y de los dedos, así como los gestos exagerados o muy forzados. La actitud normal del rostro debe ser sonriente. La sonrisa, por un efecto reflejo, permite una ampliación de las cavidades de resonancia. Para eso puede ser útil hacer las vocalizaciones delante de un espejo para observar y controlar las tensiones innecesarias.

Actitud básica para el equilibrio del cuerpo:
Pies: Confortablemente. El peso del cuerpo deberá estar igualmente distribuido por el bordillo externo de los pies por el metatarso.
Músculos: Relajados.
Cintura pélvica: Suspensa sobre el diafragma para mantener la energía del sonido.
Cabeza: Recta. Bien equilibrada en la cintura escapular.
Cintura escapular: Debe permanecer relajada.
Línea de la cabeza: La cabeza debe mantener una línea de como se estuviera suspensa por un "hilo de cabello" en la parte del remolino, es decir, en el centro, como se fuera la continuación de las vértebras cervicales.

Después de la adopción de esta actitud básica, cuando sentimos que estamos equilibrados, experimente cambiar la alineación para hacer que el cuerpo cambie la línea de gravedad, para frente, para atrás, para el lado y circularmente.

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